Ayer altos dirigentes de los tres países se reunieron en Washington para tratar el previsible lanzamiento de un misil por parte de Corea del Norte.
Los tres países acordaron trabajar conjuntamente para detener el lanzamiento. Todos ellos intentarán que este sea cancelado por vía diplomática, no cerrando esta vía hasta el último momento.
En caso de que el lanzamiento no se cancele, todos ellos consideran que se debe sancionar a Corea del Norte, así como instar a la comunidad internacional a que de una respuesta ejemplar por el incumplimiento de los tratados de la ONU.
Fuente: NHK
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