Las autoridades chinas creen que varios miembros de la etnia uigur son los responsables del choque mortal de un vehículo que se produjo el lunes en la Plaza Tiananmen, en Pekín.
Según varios analistas, es probable que el Gobierno del presidente Xi Jinping refuerce la vigilancia a este grupo étnico.
Cinco personas perdieron la vida en el choque y 40 más resultaron heridas. Entre las víctimas se encuentran los tres ocupantes del coche siniestrado.
La Televisión Central china informó el miércoles de que las autoridades habían detenido a cinco personas sospechosas de haber colaborado con los tres ocupantes del vehículo. Según el citado canal, las detenciones de todos ellos se llevaron a cabo en las 10 horas posteriores al suceso.
Al parecer, los ocupantes del coche eran un hombre, su madre y su mujer. De sus nombres se desprende que todos ellos pertenecen a la etnia uigur, al igual que los cinco detenidos.
Los medios de comunicación chinos han denominado el choque como un acto de terrorismo organizado. Además, han informado de que encontraron una bandera con inscripciones relacionadas con la guerra santa islámica en el lugar donde se alojaban los sospechosos.
No obstante, no han dicho claramente quién está detrás del incidente, pero sus palabras dan a entender que se trata de extremistas islámicos de la etnia uigur.
Este grupo étnico lleva mucho tiempo protestando contra la opresión por parte del Gobierno chino a las actividades religiosas en la región autónoma Uigur de Xinjiang.
Fuente: NHK
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