Según las autoridades chinas, se trata de un acto de terrorismo perpetrado por el Movimiento Islámico de Turquestán del Este, un grupo separatista de la región autónoma uigur de Xinjiang.
La jefa del Congreso Mundial Uigur, Rebiya Kadeer, habló el jueves en Washington con la NHK. En la entrevista dijo que no creía en la existencia de un Movimiento Islámico de tales características operando en Xinjiang. Agregó que el Gobierno chino había empezado a mencionar al grupo cuando otros líderes mundiales se comprometieron a combatir el terrorismo a raíz de los atentados del 11 de septiembre de 2001 en los Estados Unidos.
Kadeer agregó que probablemente haya deseos de venganza contra el Gobierno entre algunos uigures que perdieron a sus familiares en la campaña de represión china contra el grupo étnico y que se habían visto obligados a huir a Pakistán y a Afganistán, países colindantes.
Fuente: NHK
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