En China, las autoridades han decidido incrementar la lucha contra el extremismo para asegurar la estabilidad en la Región Autónoma Uigur de Xinjiang, tras los últimos atentados con bomba ocurridos en Urumqi, capital de la región.
El lunes, la agencia china de noticias Xinhua, de carácter estatal, informó de que la cúpula del Partido Comunista, liderada por el presidente Xi Jinping, había mantenido un encuentro para dialogar acerca de medidas contra el extremismo.
Recientemente, los líderes chinos se han mostrado cautelosos respecto al extremismo religioso de carácter regional, después de que se produjeran dos explosiones en Urumqi, capital de Xinjiang. Una ocurrió en una estación de tren el 30 de abril, mientras que la otra se produjo el 22 de mayo en un mercado matutino. Ambos atentados se cobraron las vidas de decenas de personas.
Los líderes chinos coincidieron en que la lucha contra el separatismo será larga, complicada y dura, y cobrará intensidad por momentos.
Todos ellos mostraron su determinación a fomentar la unidad étnica en la región, con el objetivo de restaurar la estabilidad social. Muchas personas de etnia uigur son musulmanes. Además, señalaron que se centrarán en la educación religiosa como medio para aumentar el patriotismo.
Fuente: NHK
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