La gestora de la central nuclear Fukushima Uno tomará medidas adicionales para acelerar los trabajos de congelación del agua radiactiva en los túneles subterráneos que actualmente llevan cierto retraso.
El agua utilizada para enfriar el combustible fundido de los reactores dañados se ha salido de los edificios de los reactores y ha ido a parar a los túneles subterráneos de la instalación. Allí se ha mezclado con el agua del subsuelo y podría estar filtrándose por la tierra y acabar llegando al mar.
Las labores están pensadas para prevenir esa contingencia con el agua contaminada, pero los túneles todavía tienen que congelarse por completo unos tres meses después de haber comenzado el proyecto.
El miércoles, la Compañía de Electricidad de Tokio informó de las medidas adicionales a los miembros de la Autoridad de Regulación Nuclear. Entre ellas, se incluye la instalación de más tuberías para transportar el refrigerante dentro y fuera de los túneles y añadir hielo en estos. Todo ello tendría lugar a finales del próximo mes. Además, TEPCO empleará sacos terreros para rellenar las secciones donde no pueden instalarse tuberías.
Funcionarios del ente regulador criticaron el plan original de TEPCO por ser demasiado optimista.
Fuente: NHK
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