"Buenos Días" o "Ohayô" es una película de uno de mis directores favoritos, y uno de los grandes de la historia del cine Yasuhiro Ozu.
Puede que no sea muy objetivo hablando de este director, pero voy a intentar hacer una entrada que no se deje llevar demasiado por mis preferencias.
"Ohayô" es una comedia de 1959. En ella se nos platea la lucha que emprenden dos niños para conseguir que sus padres les compren un televisor. La película es un buen ejemplo del cambio en la sociedad japonesa de post-guerra, así como la aparición de nuevas necesidades.
Una comedia que atendiendo al contexto japonés, y conociendo un poco los modales sociales, puede mostrarnos un reflejo de la misma. Las acciones de los niños, dentro de ese contexto, desencadenan una serie de acontecimientos inesperados, que sirven para mostrar a la sociedad japonesa tal y como es.
Lo que parece una comedia sencilla en su planteamiento, encierra un gran mensaje detrás, un mensaje que tiene que ver y está relacionado con la sociedad en sí.
Por lo demás, la obra muestra todo el estilo cinematográfico del genio japonés. Desde aspectos técnicos a temas narrativos, una obra muy recomendable y una gran forma de empezar a conocer el cine clásico japonés.
Por Iván Rodríguez
Puede que no sea muy objetivo hablando de este director, pero voy a intentar hacer una entrada que no se deje llevar demasiado por mis preferencias.
"Ohayô" es una comedia de 1959. En ella se nos platea la lucha que emprenden dos niños para conseguir que sus padres les compren un televisor. La película es un buen ejemplo del cambio en la sociedad japonesa de post-guerra, así como la aparición de nuevas necesidades.
Una comedia que atendiendo al contexto japonés, y conociendo un poco los modales sociales, puede mostrarnos un reflejo de la misma. Las acciones de los niños, dentro de ese contexto, desencadenan una serie de acontecimientos inesperados, que sirven para mostrar a la sociedad japonesa tal y como es.
Lo que parece una comedia sencilla en su planteamiento, encierra un gran mensaje detrás, un mensaje que tiene que ver y está relacionado con la sociedad en sí.
Por lo demás, la obra muestra todo el estilo cinematográfico del genio japonés. Desde aspectos técnicos a temas narrativos, una obra muy recomendable y una gran forma de empezar a conocer el cine clásico japonés.
Por Iván Rodríguez
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