La obra adaptó parte del manga del mismo nombre, y se centraba en un grupo de estudiantes de la academia de "Shinigami-sama" (Dios de la muerte) que pretenden conseguir este objetivo, pero pronto se verán inmersos en los planes de una malvada bruja, que pretenderá destruir el mundo tal y como se presenta hoy para conseguir su felicidad.
La obra es un shônen con altas dosis de humor, sobretodo en algunos de sus episodios, posee todas las características de este tipo de obras, con una mezcla de fantasía, humor y acción, pero eso sí, con una estilo de animación renovadora, no basado en los estilos tradicionales, mostrando una mezcla e influencia de otros estilos de animación occidentales, pero manteniendo las características y el formato del anime.
Poco a poco, y a medida que los episodios avanzan, la historia inicial se va complicando, olvidando el argumento inicial para centrarse en una historia más complicada y compleja, que poco o nada tenía que ver con ese comienzo.
La historia se va oscureciendo y mostrando un argumento más oscuro y complicado, sumergiendo al espectador poco a poco en este aspecto, lo que produce que el cambio sea gradual, y por lo tanto bien aceptado por el espectador, que no se encuentra sorprendido de este cambio de actitud.
Por: Iván Rodríguez
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