Inspectores en la averiada central nuclear Fukushima Uno están revisando si hay fugas en los cerca de 350 tanques para almacenar agua radiactiva.
La Compañía de Electricidad de Tokio, que gestiona la planta, descubrió el lunes que se habían filtrado más de 300 toneladas de agua altamente radiactiva de uno de los tanques.
Se teme que el agua contaminada se esté fluyendo hacia el mar por medio de un sistema de drenaje.
El miércoles por la noche, trabajadores de TEPCO terminaron de trasladar las 700 toneladas de agua restantes a otro tanque.
En estos momentos se encuentran examinando el recipiente para localizar el lugar de la fuga.
Sin embargo, no será posible realizar una inspección exhaustiva hasta la próximo semana, debido a los altos niveles de radiación que hay dentro del tanque.
Por este motivo, los operarios se han centrado en los otros tanques, unos 350, que son del mismo tipo. Están construidos con láminas de metal sujetas con tornillos, en lugar de ir soldadas.
Están efectuando una inspección ocular y midiendo los niveles de radiación alrededor de los recipientes. Tienen previsto terminar la tarea para el viernes.
Fuente: NHK
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