La prefectura de Fukushima ha efectuado el primer encuentro de un grupo de expertos encargado de examinar las pruebas médicas que se están realizando a niños y jóvenes para comprobar si tienen cáncer de tiroides.
Las sustancias radiactivas emitidas en Fukushima Uno pueden acumularse en la glándula tiroides y generar cáncer.
La prefectura está analizando las glándulas de 360.000 personas que tenían 18 años o menos en el momento en que tuvo lugar el accidente nuclear en marzo de 2011. De las personas sometidas a la prueba, 26 han sido diagnosticadas con cáncer de tiroides.
En la reunión del miércoles, los expertos subrayaron la importancia de instaurar un sistema para realizar más chequeos. Indicaron que la prefectura debe solicitar a más hospitales locales que los efectúen.
Algunos miembros del grupo hicieron un llamamiento para que se hagan este tipo de pruebas a gran escala fuera de la prefectura. Además pidieron la opinión de especialistas en tiroides con el fin de comprobar la relación entre la exposición a la radiación y el cáncer.
Fuente. NHK
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