Estas lentes revolucionarias, que saldrán a la venta el próximo año, han sido desarrolladas por la cadena de ópticas JIN y el neurocientífico de la Universidad de Tohoku Ryuta Kawashima.
Las gafas están provistas de unos sensores que detectan cambios mínimos de voltaje que se producen durante el movimiento de los ojos. Estos datos y otros tales como el número de parpadeos y la rapidez con que se pestañea son transmitidos a un teléfono inteligente.
La información se procesa y se clasifica en tres niveles, en el caso de la somnolencia. Lo mismo ocurre con el grado de fatiga. Estos datos son especialmente útiles para los conductores, ya que el usuario puede decidir cuándo parar a descansar.
El presidente de las ópticas JIN, Hitoshi Tanaka, dice que las gafas pueden prevenir accidentes de tráfico y mejorar la salud de la gente alertando del exceso de trabajo.
Fuente: NHK
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