Yoon Jin-sook hizo estas declaraciones ante la prensa el lunes. Además, dijo que Japón tiene la responsabilidad de informar a su país y a otras naciones; sin embargo, en lugar de hacerlo, dejó que el agua contaminada siguiera su curso libremente, un comportamiento que denominó absurdo.
Con anterioridad, el Gobierno surcoreano había establecido una prohibición sobre las importaciones de productos marinos de 8 prefecturas japonesas, entre ellas Fukushima.
La ministra declaró que dudaba de si el Gobierno de su país debe regirse por protocolos diplomáticos a la hora de tratar con gente tan inmoral como las autoridades japonesas, de ahí que ordenara de inmediato la prohibición.
Estos comentarios se producen en medio de la difícil situación que atraviesan los pescadores en Corea del Sur, ya que los consumidores de ese país están cada vez más preocupados por la seguridad en lo que respecta a los productos marinos en general, no sólo a los de Japón.
Fuente: NHK
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