Un académico uygur de Pekín ha recibido amenazas de las autoridades chinas después de expresar dudas sobre las alegaciones del Gobierno de que un grupo separatista estaría detrás del mortal incendio de un coche cerca de la plaza Tiananmen.
El incidente se saldó con cinco muertos y 40 heridos. Entre los fallecidos estaban 3 personas que iban dentro del coche, que al parecer eran uygures.
Otros cinco que también serían de la misma etnia fueron detenidos. Los líderes chinos afirman que el incidente fue un acto de terrorismo y han reforzado su control sobre la minoría uygur.
Ilham Tohti, un académico uygur que trabaja en Pekín, usó medios de comunicación extranjeros, incluyendo nuestra NHK, para criticar al Gobierno chino, afirmando que no hay suficientes pruebas de que fuera un ataque terrorista organizado y premeditado.
Según algunas fuentes, inmediatamente después de que Tohti dejara su casa junto a su familia en un coche el sábado, miembros de las fuerzas de seguridad estrellaron su auto contra el vehiculo del académico y confiscaron el teléfono móvil de su esposa.
También se afirma que los agentes dijeron que la muerte Tohti no sería importante. También exigieron saber quién le dio permiso para hablar con los medios.
Fuente: NHK
El incidente se saldó con cinco muertos y 40 heridos. Entre los fallecidos estaban 3 personas que iban dentro del coche, que al parecer eran uygures.
Otros cinco que también serían de la misma etnia fueron detenidos. Los líderes chinos afirman que el incidente fue un acto de terrorismo y han reforzado su control sobre la minoría uygur.
Ilham Tohti, un académico uygur que trabaja en Pekín, usó medios de comunicación extranjeros, incluyendo nuestra NHK, para criticar al Gobierno chino, afirmando que no hay suficientes pruebas de que fuera un ataque terrorista organizado y premeditado.
Según algunas fuentes, inmediatamente después de que Tohti dejara su casa junto a su familia en un coche el sábado, miembros de las fuerzas de seguridad estrellaron su auto contra el vehiculo del académico y confiscaron el teléfono móvil de su esposa.
También se afirma que los agentes dijeron que la muerte Tohti no sería importante. También exigieron saber quién le dio permiso para hablar con los medios.
Fuente: NHK
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